sábado, 17 de agosto de 2013

Article Manuel Calvillo

No conozco los curriculum de los estudios de arquitectura o los de turismo pero sí ando por las calles, paseo por las plazas y entro y salgo de escuelas, hospitales, tiendas, bloques de pisos, reservo mis vacaciones, descanso en hoteles, viajo en avión, entro a museos o trato con guías turísticos. Los espacios públicos, los edificios, nuestras calles y plazas, los servicios de ocio, turismo y viajes que diseñan unos y otros profesionales son una declaración de intenciones, un TAC cerebral, un mapa mental de la formación recibida, de sus maneras de entender la sociedad, las relaciones y el ser humano.
 La experiencia de recorrer estos espacios con maletas, con un carrito de bebe, con niños pequeños, con 85 años, con familiares TEA o al lomo de una silla de ruedas puede darnos algunas pistas de las prioridades de las personas que diseñan nuestras ciudades o nuestro ocio, de las personas que diseñan estos contextos vitales –físicos y sociales- que facilitarán unas experiencias y dificultarán otras; un entorno impuesto, al fin y al cabo, en el que se ha de producir  la “selección natural” de la fauna humana y que justificará “por naturaleza” injustas desigualdades.
...

http://manuelcalvillo.blogspot.com.es/2013/08/factorias-de-la-ceguera.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed:+LaTiranaDeLaNormalidad+(La+tiran%C3%ADa+de+la+normalidad)&m=1

1 comentario:

  1. Molt bon article, però cal, a més d'exigir prou més als professionals, reflexionar també del paper que juguem tots nosaltres, els ciutadans que habitem eixos edificis i ciutats. Els ciutadans tenen una responsabilitat molt important respecte la seua ciutat, per lo qual cal que desde menuts els col.legis eduquen en conciència social i urbana, per a que els ciutadans aprenguen a estimar els espais que habiten, respecten el seu entorn i exigisquen edificis i ciutats més humanitzats.

    ResponderEliminar